En su primer año en la categoría, Diego Di Fiore se convirtió en el mejor debutante de la temporada 2019. El piloto de Lobería radicado en Mar del Plata sumó prácticamente en todas, ganó una de las fecha en Brandsen y se metió en el tercer escalón del podio del campeonato anual.

      Para comenzar la semana de un modo distinto, ya que no podemos movernos de casa, hemos decidido realizar un viaje virtual hacia la ciudad Feliz, para visitar a nuestro piloto DIEGO DI FIORE. Gentilmente el joven de Lobería nos abrió las puertas de su casa y luego de una charla amena y unos mates imaginarios nos animamos a confeccionar esta nota…

      Y para comenzar por el principio, le pedimos a Diego que nos realizara un pequeño resumen de lo que fue su primer año en la divisional, o dicho de otra manera que nos hiciera un balance del 2019, y esto fue lo que nos respondió:

“El 2019 fue un gran año. Nos permitió conocer una categoría muy competitiva y con un gran parque de autos. La verdad es que se trabajó mucho, fecha tras fecha, para  poder ser competitivos y llegar a las últimas competencias peleando con uñas y dientes el tercer escalón del podio. Quizás para algunos suene conformista esta última frase, pero sabiendo del parque, de la cantidad y calidad de pilotos y la nula experiencia que teníamos en cada uno de los circuitos en que competimos, a excepción de Dolores, para todo nuestro equipo sin dudas que el 2019 fue un año excelente.”

      Pero además, Di Fiore destacó algo que para nosotros es súper importante y es la calidad humana con la que se encontró en la Monomarca Fiat de acá de La Plata, algo que no siempre se ve en todas la divisionales. Y disculpen que seamos reiterativos, pero realmente esto último nos reconforta muchísimo.

“Además de encontrarme con una experiencia desafiante en el aspecto deportivo, tuve la fortuna de conocer muchas personas que se brindaron para con nosotros, tanto de la comisión, como los pilotos, preparadores, mecánicos y algún que otro personaje lindo del automovilismo que nunca falta. Sinceramente me alegra mucho formar parte de esta familia llamada Monomarca Fiat, que aun manteniendo el espíritu de un zonal no deja de ser una categoría de la que todo el mundo habla…” agregó el loberense.

       Pero bueno, al pasado pisado…y a partir de este momento nos metemos de lleno en la temporada 2020, complicadísima por cierto, en todo sentido. Por tal motivo, más allá de los “pormenores” y la “incertidumbre” le consultamos a Diego cómo se preparaba para encarar este segundo año en la Monomarca Fiat, y esto fue lo que nos contestó:

“Este año nos agarró a contramano, y si bien es poco lo que falta para que el auto esté listo, nos quedaron los elementos dispersos por varios lados sin poder ensamblarlos. Nos preparábamos para encarar la primera fecha con muchas expectativas debido a los buenos resultados obtenidos en Brandsen el año pasado, sabiendo además que era una de las plazas donde podía llegar a aspirar a ganar una final, la cual me permitiera alcanzar el pasaporte para pelear por el campeonato. Siendo honesto, el Mouras y Buenos Aires son plazas donde nos costó mucho tener el nivel de la punta y tuvimos que conformarnos con sumar. Obviamente que seguimos trabajando para minimizar esa brecha, de hecho se invirtió bastante en nuevos elementos para este año, pero sé que la mayoría me lleva muchas vueltas de ventajas, fundamentalmente en La Plata…

       Por su parte, Diego nos comentó que esta cuarentena lo encontraba trabajando –ya que él trabaja en una fábrica de alimentos– pero además estaba aprovechando para avanzar en su otra pasión que es “la música”. Nos manifestó que le estaba metiendo muchas horas al bajo para aspirar, algún día, a ser como piloto “un buen bajista” ja, ja.

      Y de esta manera, cerramos el capítulo de este día lunes, agradeciéndole obviamente a Diego Di Fiore, quien nos permitió entrar a su casa una vez finalizado su día laboral. Nosotros nos despedimos hasta el próximo encuentro, pero no sin antes dejarle el párrafo final al crédito de Lobería y Mar de Plata…

“Respecto a la gente que está detrás de todo esto, permítanme agradecer al equipo, a Milo en el chasis, Gustavo Vázquez en el motor, Eduardo Prado en la caja, los hermanos Resumil, Pablo Mattei y en especial a mi viejo que es el nexo de todo este grupo. A mi familia obviamente que me apoyan y me bancan en esto, a Luciano Moretti que se acuerda siempre de nosotros y lógicamente a los auspiciantes que nos acompañan en este proyecto como la gente de Cereales Lobería, Agrícola Noroeste, Santamaría Haciendas, Ceremeluk, Carnicería Campos del Este, Guerrero Maquinarias, DAHA SRL, CKC, La Fusta, Agro Milenio, Mónaco Maquinarias, MN, Gomería Norte, Pinturería Puesta del Sol y a Tito y Freddy de AGR Partes SH.” cerró Di Fiore #3.